Como es del conocimiento de la mayoría de nuestros agremiados, la Sociedad de Ingeniería de Tasación de Venezuela (SOITAVE Nacional), cumplió hace poco cincuenta y cuatro años de intensa existencia (su fundación fue el 12 de Febrero de 1965). En esa época se llamaba Sociedad de Tasadores de Venezuela (SOTAVE) y nació como una pequeña sociedad formada por un grupo de veintisiete jóvenes visionarios que en el mes de Diciembre de 1964 (con el apoyo de la Asociación de Agrimensores de Venezuela, Contraloría General de la República y el Colegio de Ingenieros de Venezuela), en el Hotel Bolívar de la ciudad de Lima (Perú), tomaron la determinación de crear en Venezuela una sociedad profesional similar a las que entonces detentaban la vanguardia en la organización de la actividad valuatoria a nivel continental. Durante más de cinco décadas, muchas cosas han pasado, destacándose quizás el hecho de que en el año de 1990, a solicitud del Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV), se modifican los estatutos fundacionales, para que de ahora en adelante, sus miembros solo sean profesionales activos de la ingeniería, arquitectura y profesiones afines (bajo el marco de la ley de ejercicio de la Ingeniería, la Arquitectura y Profesiones afines), con lo cual su nombre se modificó a Sociedad de Ingeniería de Tasación de Venezuela (SOITAVE); para ese momento, luego de 25 años de existencia, la Sociedad a nivel Nacional, contaba con apenas 500 miembros activos; podemos decir que se trata de una sociedad civil sin fines de lucro que agrupa a los profesionales de la valuación en Venezuela, con sede principal en Caracas, y que en la actualidad cuenta con representaciones o seccionales en las principales ciudades y regiones del país. En este pequeño espacio que me brinda este medio comunicacional que inaugura la nueva Junta Directiva de SOITAVE Carabobo, trataré de informar aquellos recuerdos del nacimiento de nuestra seccional en el Estado Carabobo, abarcando los primeros quince años.

Para el año de 1985, cuando un grupo de miembros de la Sociedad dieron los pasos para crear la Seccional Regional, lo primero en recordar es que era el período donde la Sociedad funcionaba como una asociación abierta, sin distingos de profesión o formación, donde los miembros a nivel Nacional eran apenas trescientos cuarenta y nueve (bachilleres, técnicos, contadores, abogados, economistas, médicos, constructores, ingenieros y arquitectos), que habían sido aceptados luego de cumplir con los requisitos de entrada, de orden formal y de conocimientos, los cuales debían estar avalados por tres miembros solventes de la Sociedad, presentarlos ante la Junta Directiva y filtrados por un Comité de Admisión, donde se revisaban hasta los errores ortográficos, lo interesante recordar, es que según los estatutos de la época, para poder fundar una Seccional se exigía un mínimo de diez miembros activos, por lo que fue necesario agrupar miembros de cinco Estados (Carabobo, Aragua, Cojedes, Yaracuy y Lara) y llamarla “SOTAVE del Centro”, la cual fue fundada formalmente el 18 de julio de 1986 en las instalaciones de la Asociación de Ejecutivos del Estado Carabobo, con la asistencia de la Junta Directiva Nacional (Ing. Néstor Belfort), una delegación de la Seccional de Occidente (Econ. José Francisco Maradey) y con un estimulante discurso del Dr. Manuel Blonval López; su primera Junta Directiva quedó integrada por Ing. Golfredo Dugarte Moreno (Presidente), Ing. German Saer Sarquis (Vicepresidente), Ing. Enrique García Grooscors (Secretario), Ing. Omar Rodríguez Izquierdo (Tesorero) e Ing. Leopoldo Giménez Ramírez (Vocal); siendo la segunda Seccional Regional en ser instalada, pues la primera en ser fundada en 1982 fue la de Occidente en Maracaibo.

Esta Junta directiva de la Seccional Centro estuvo desde 1986 hasta 1990, luego desde 1991 hasta 1994 le tocó al Ing. Enrique García Grooscors (Presidente), Tibaldo Bordones (Vicepresidente), Lic. Gabriel Letina W. (Tesorero), Ing. Yony Matos (Secretario) e Ing. Daniel Segura (Vocal); durante este período ya habían nacido las Seccionales de Lara, Guayana y Táchira. Para el año de 1996 ya habían sido fundadas Aragua y Mérida, la Junta Directiva (ahora de SOITAVE Carabobo) estuvo conformada, para el período 1995-1997, por: Tibaldo Bordones (Presidente), Ing. José Sirica (Vicepresidente), Ing. Carlos Gil (Tesorero), Ing. Olga Pérez (Secretaria) y como vocales Ing. Saúl González, Ing. Antonio Scolamiero e Ing. Augusto Maduro; durante esta gestión se logró la construcción y puesta en funcionamiento de nuestra actual sede en el Centro de Ingenieros del Estado Carabobo (CEIDEC). Es interesante recordar que en la celebración del primer año de nuestra Seccional (1987) se realizó en el Centro de Ingenieros del Estado Carabobo, el foro “La Inflación y la Revaluación del Activo Fijo” a cargo del Doctor Carlos Acedo Mendoza, con la participación de la Escuela de Contaduría Pública de la Universidad de Carabobo y los Colegios de Profesionales de la Economía y Contaduría, donde asistieron más de 300 personas, así como la realización de curso de Avalúo Inmobiliarios dictado por el profesor Abelardo Palaco y nuestra presencia en el IV Congreso Venezolano de Valuación y III Jornadas Nacionales de Catastro en Caracas.

Para esa época (1992) la Seccional no contaba con sede para su reuniones (se realizaban en la Oficina del Ing. Golfredo Dugarte en la Torre Hércules), y dado el viraje dado para la admisión de miembros (1990), Carabobo no contaba con los cursos exigidos en el Reglamento Nacional; en tal sentido, bajo la gestión del Presidente del Centro de Ingenieros del Estado Carabobo (CEIDEC), Ing. Carlos Humberto Henríquez Sánchez, y la del Ing Enrique García Grooscors (SOITAVE Carabobo), se logra la autorización para construir en el segundo nivel lo que es parte de nuestra sede (oficio del 11/10/1992), la cual fue ejecutada entre marzo y diciembre de 1993, parte con aportes especiales dados por el Ing. Jony Matos Toro y el Ing. Enrique García Grooscors. Aquellos momentos de ejecución de la obra fueron bien estresantes y desagradables, pues en ese tiempo hubo elecciones en el CEIDEC y la nueva directiva quiso desconocer la autorización de la gestión anterior y con criterios falsos (arquitectura en desarmonía, permisología, construcción bajo cables de alta tensión, etc.) hicieron todas las gestiones posibles ante los organismos del Estado (Dirección de Desarrollo Urbano de la Alcaldía, Prefectura, Policía del Estado, Fiscales, MINDUR) para paralizar y demoler la Oficina que con tanto amor y sacrificio se había realizado; tal área, hoy corresponde a la Sala de Reuniones y Biblioteca de nuestra Seccional. Por otro lado, se preparó ante la Comisión de Educación de SOITAVE Nacional, todo el material necesario para que con profesores del Estado Carabobo y Aragua se realizara el Primer y Segundo Curso de formación de Tasadores, el cual se inició en mayo de 1992 con una duración de 160 horas, en la sede del núcleo de la Universidad Simón Bolívar en la Urbanización Carabobo. Entre quienes concluyeron el curso y pasaron a ser miembros activos se recuerda al Ing. Carlos Gil, Ing. Robert Aoun, Ing. Soveida Rodríguez, Ing. Antonio Scolamiero, Ing. María E. Letina, Ing. José A. Rocha, Ing. Olga Pérez, Ing. Miguel García, Ing. Judith Morles, Ing. José Sirica y el Ing. Saúl González. Igualmente, se realizó el Segundo Curso Profesional en al año 1993, saliendo graduados; Ing. Yanet Canela, Ing. Augusto Maduro, Ing. David Carreño, Ing. Lourdes Díaz, Ing. José Caraballo, Ing. Glenda Vernaez, Ing. Delcy Muñoz, Ing. Luis Acero, Ing. Mario Tirri, Ing. Eddy Rodríguez, Ing. Ivonne Tellez, Ing. Ana Teresa Hernández, Ing. Claudia Lamberti, entre otros que llegaron a casi cien colegas en esos dos primeros Cursos. Debo también mencionar que durante la gestión de Tibaldo Bordones (1995-1997) se creó la Comisión de Educación a cargo de la Ing. Olga Pérez, destacando entre los logros de esta comisión: la realización de cursos de actualización en diferentes áreas, algunos de los cuales contaron con el aval y la participación del Instituto de Investigaciones de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de Carabobo (INFACES), y de la Procuraduría General del Estado Carabobo; la realización de dos Cursos Profesionales (1996) como cursos no conducentes del Área de Estudios de Postgrado de la Universidad de Carabobo, estas dos cohortes conformaron un número importante de graduados, entre lo que están miembros de la actual Junta Directiva: el Arq. Domingo Romero, el Ing. Fernando De Macedo, el Ing. Pacífico Monasterios y el Ing. Pedro Quinci.

Continuando con las seccionales y directivas, tenemos que para el año 1998 se habían fundado la seccionales de Nueva Esparta, Monagas, Anzoátegui, Portuguesa, Trujillo y Barinas; la Junta Directiva de Carabobo (1997) estaba compuesta por; Ing. Robert Aoun (Presidente), Ing. Olga Pérez (Vicepresidente), Ing. Eddy Rodríguez (Secretario), Ing. Antonio Scolamiero (Tesorero), e Ing. José Sirica (Vocal); en 1998 es designada Presidente la Ing. Olga Pérez. Para el período 1999 al 2001 fue electa una nueva directiva de SOITAVE Carabobo conformada por el Ing. Antonio Scolamiero P. (Presidente), Ing. Enrique García Grooscors (Vicepresidente), Ing. María Letina (Secretaria), Ing. Pacífico Monasterio (Tesorero), e Ing. Pedro Quinci (Vocal), siempre será recordada la valiosa gestión del colega Ing. Antonio Scolamiero P., destacándose, entre muchos de sus logros, la exitosa realización del VIII Congreso Venezolano de Valuación y Catastro, además del Congreso Extraordinario de la UPAV el 11, 12 y 13 de octubre de 2001 en Valencia (en homenaje póstumo a este destacado y recordado colega ExPresidente de la Seccional Carabobo de SOITAVE, se celebró en el Hotel Guaparo Inn de la ciudad de Valencia, del 31 de mayo al 1º de junio de 2013, las Primeras Jornadas Carabobeñas de Tasación “Ing. Antonio Scolamiero”, bajo la presidencia del Arq. Domingo Romero). Como hemos visto en este corto paseo de los primeros quince años de SOITAVE Carabobo, su crecimiento como organización se evidencia en la manera como aumentó la matrícula, producto del intenso programa educativo desarrollado, así como el valioso aporte de varios colegas..., queda en manos de esta nueva generación el reto de que esta Sociedad continúe y siga aportando valores materiales y espirituales.